Aunque no lo creas los delgados alambres que tienen la rueda de tu bicicleta es una parte muy importante, probablemente no le has dado la importancia que merecen, pero los rayos o radios realizan uno de los trabajos más duros e importantes de nuestra bici, soportar nuestro peso y transferir la potencia desde la masa hasta la rueda, además mantiene íntegra la forma del aro y aunque se escuche increíble es uno de los elementos más antiguas de la bici.
El material con lo que comúnmente están fabricadas son de aluminio, pero también existen de acero inoxidable o fibra de carbono. La función de los rayos es la misma para todas las bicicletas, que es minimizar el peso para mejorar el desempeño, pero como todo, en el ciclismo también nos encontramos con diferentes tipos de rayos, ya que depende mucho para que tipo de ciclismo lo vamos a ocupar y hasta la cantidad que tienen en cada rueda, por ejemplo, podemos encontrarnos bicicletas que cuentan con solo 14, pero recuerda que entre menos rayos, el espaciamiento entre estos debe de ser mayor, lo que generaría una rueda más débil y para compensar esto es necesario usar un rin más resistente y pesado, al contrario, si tu rueda cuenta con más rayos, la fuerza es mayor y la tensión y carga del peso se reparte entre un mayor número de rayos que conforman la circunferencia haciéndola más fuerte.
Los rayos se tensan y comprimen repetidamente con cada giro y llevan las fuerzas de aceleración del pedaleo desde la masa hasta la llanta, así como también transmiten las fuerzas de frenado, estos alambres son creados por las diferentes superficies del camino por donde pedaleamos, se comprimen sistemáticamente a medida de que la rueda gira y las cargas se transfieren de un rayo a otro, una vez bajo tensión, los rayos apoyan esencialmente el borde de la rueda usando la masa como el ancla central, cada rayo tira con la misma tensión para distribuir la carga de manera uniforme a lo largo de la rueda mientras mantiene la llanta circular y rodando en línea recta.
Si se te llegará a romper un rayo, el equilibrio está en peligro, por las razones que te hemos comentado anteriormente, la recomendación es que te bajes de inmediato y no dudes en visitar un taller para que cambien el o los rayos dañados.
Como siempre te hemos mencionado en nuestros blogs anteriores es de suma importancia que revises tu bici antes de salir y los rayos no deben de ser la excepción.
Es muy sencillo revisarlos, solo debes de tocarlos de dos en dos con los dedos de la mano, haz un poco de fuerza y así notarás si alguno está flojo, si uno llega a estar así mejor no salgas y reparala o mandala a reparar de inmediato.
En www.ciclometa.com puedes encontrar variedad de rayos. También puedes visitarnos en Calle Lago Muritz No.30, Mariano Escobedo, Colonia Anáhuac, Alcaldía Miguel Hidalgo, CDMX o en Calle Regina 144, Centro Histórico, Alcaldía Cuauhtémoc, CDMX.
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